Corresponde confirmar la sentencia de grado en cuanto declaró no ajustado a derecho el despido directo dispuesto por la empleadora, pues debe tenerse en consideración que habiéndose extendido la relación laboral por más de 26 años, el ejercicio del poder disciplinario -evidenciado a través de la aplicación de sanciones- recién se advierte en los últimos diez meses.
El acto u omisión que pueda generar la injuria laboral debe revestir entidad suficiente para no dejar dudas que se trata de una falta realmente grave, que destruya definitivamente el principio de disciplina.
CNTrabajo, Sala I, Lencina, Eduardo J. c/Consorcio de Propietarios del Edificio Formosa 179 s/Despido, 20-11-2007, IJ-XXIII-404
